Chance en los Pollitos

Pues bien, para empezar mis aventuras en este mundo de los blogs (por cierto muy rudimentarios mis conocimientos hacerca de esto), hablaré de una frase que se arraigó mucho entre mi familia y que poco a poco algunos amigos con los que comparto el gusto por los videojuegos han comenzado a utilizar.

La frase en cuestión es la que le da el título a este blog. Nace un día de aquellos buenos tiempos, donde el rey de las maquinitas (arcades) era nada más y nada menos que su majestad el Street Figther II. Haa tan solo de recordarlo la nostalgia llega a mi jeje, pero bueno, teníamos un amigo en una ciudad vecina (Jacona, Mich) en donde vendían abarrotes, y como era la usanza en aquellos dias, sus cajones de maquinitas en un rincón. Nosotros nos juntábamos todos los domingos con la familia a comer, y los refrescos y alguna que otra cervecilla (que por cierto eran para los adultos, yo todavía estaba en plena infancia), se las íbamos a comprar a la casa de este amigo y de paso aprovechábamos para jugar una buena reta del Street Figther antes de volver con el encargo a la casa. En una de esas retas, me encontraba jugando en contra de este amigo que era el que menos sabía jugar (ni por tener la maquinita en su casa mejoraba), y en el juego solian "marearse" los personajes después de que te daban cierta cantidad de golpes contínuos.

Había dos tipos de mareos, uno en el cual salían estrellitas alrededor de la cabeza del mono, y si después de eso te seguían aplicando combos o golpes te volvían a marear pero ahora salian unos pollitos en la cabeza, que indicaban que no más no dabas una. Entonces, cuando me disponia a darle el golpe de gracia ya que se encontraba mareado, de pronto empieza a mover la palanca y a apretar todos los botones como loco y me dice: "espérate, espérate, dame chance en los pollitos".

      

Como pueden imaginar, los que nos encontrábamos presentes (mi hermano cidroq y mi primo el chango) soltamos la carcajada y de ahí en adelante hemos empleado esa frase cuando nos están pateando feo el trasero en cualquier videojuego, o ya sea cuando nos agobian con muchas preguntas y tenemos pocas respuestas (como con la esposa jaja).

Así que ya lo saben, cuando los esten destrozando en un videojuego, o cuando los esten abrumando de preguntas o trabajo pidan que les den CHANCE EN LOS POLLITOS.